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¿Qué dices?
Pues que estoy quemado.

(que usa internamente las herramientas OpenAI)
Síndrome de BurnOut
El burnout o síndrome de quemarse por el trabajo se caracteriza por un estado de agotamiento físico, mental y emocional prolongado, resultante de un estrés laboral crónico. Este fenómeno no solo afecta el bienestar del individuo, sino que también repercute negativamente en la productividad y en el ambiente laboral. Además también afecta a las relaciones familiares y sociales. Vamos que hacemos pleno de efectos negativos sobre la persona que lo padece.

Causas más comunes
¿Hace falta explicarlas? Bueno en su mayoría es sentido común.
- Todo es Urgente: Los proyectos con plazos ajustados y la cultura del «todo es urgente» pueden llevar a un estrés mental continuo y a sentir que siempre se están apagando fuegos o poniendo parches, sin construir con bases sólidas y teniendo la sensación de vacío.

- Mala gestión de proyecto: Si estás en un proyecto donde no están claras las tareas, los plazos, la planificación, la asignación de esfuerzos la incertidumbre genera caos y el caos es un estresante que afecta a todo el mundo.
- One Man Band: Entre que no sabes medir tus fuerzas y te metes en responsabilidades tú sólo, o que se dimensiona mal el equipo, terminas tocando 3 instrumentos. Al final la orquesta suena mal.

- Falta de Equilibrio entre Trabajo y Vida Personal: El trabajo remoto, a pesar de sus ventajas, puede difuminar los límites entre la vida personal y profesional.

- Cultura de Siempre Estar Disponible: La expectativa de estar siempre disponible, incluso fuera del horario laboral, aumenta el estrés.

- Falta de Apoyo y Reconocimiento: La ausencia de un ambiente de apoyo y la falta de reconocimiento pueden disminuir la moral y aumentar el riesgo de burnout.

¿Y cómo sé que tengo estoy quemado?
Pues porque huele a humo ¿no?.
Esto es como decirle a alguien que le vas a dar un puño en la cara, y que te pregunte ¿Cómo sabré cuando me has dado el puño?. Lo sabrás, dolerá y te dejará tirado en el suelo.
Esa es la definición rápida, ahora bien, algo más detallado sería cuando sufres:
- Agotamiento físico y emocional: Fatiga constante, falta de energía, sensación de vacío. Un dolor constante y profundo de cabeza, mareos, falta de sueño…
- Desconexión: Sentirse desconectado de los proyectos y de los compañeros de trabajo.
- Disminución del rendimiento profesional: Aumento de errores, dificultad para concentrarse y toma de decisiones.
- Cinismo hacia el trabajo: Sentimientos negativos y cínicos hacia los clientes o el trabajo en sí. No te hace falta una cerilla para encenderte.

Una fiesta, vamos.
¿Qué se puede hacer?
Pues aquí yo veo dos niveles de actuaciones distintos. Haciendo un símil de que el Síndrome del Burnout es caer en un pozo hay que saber que hacer para no caer y qué poder hacer para salir si ya has caído.

Evitar caer en el pozo
Para evitar caer en el pozo hay varias cosas que se pueden prevenir.
- Equilibrio entre trabajo y vida personal: Establece límites claros entre el tiempo de trabajo y el tiempo personal. Aprende a decir «no» a tareas que excedan tu capacidad o horario.
- Gestión del tiempo y prioridades: Utiliza técnicas de gestión del tiempo, como la matriz de Eisenhower, para priorizar tareas basándote en su importancia y urgencia.
- Descanso y desconexión: Asegúrate de tomar descansos regulares durante el día de trabajo y desconecta completamente del trabajo durante tus días libres.
- Apoyo social: Mantén una red de apoyo sólida, tanto en el trabajo como fuera de él. Comparte tus experiencias y preocupaciones con amigos, familiares o colegas de confianza. No temas hablar, ser sincero, aunque creas que va a sentar mal.
- Cuidado personal: Incorpora actividades que fomenten tu bienestar físico y mental, como el ejercicio, la meditación, lectura, o hobbies que disfrutes. ¿Vale escribir un blog sobre tu profesión? No.
Salir del pozo
Amigo, ya has caído y es muy difícil salir, vas a tener heridas al caer y al intentar salir. Y te van a quedar cicatrices, pero cuando estás dentro solo hay un camino, hacia arriba para salir.

Algunas ideas para salir pueden ser:
- Aceptación: Acepta tu estado mental y físico. Toma perspectiva y mira lo que te está dañando. Piensa que este estado es un círculo vicioso, cuanto más trabajo tienes, peor estás, menos productivo eres y más trabajo se acumula.
- Levanta la mano: La única forma de parar ese círculo vicioso en el trabajo es levantar la mano, decir que estas mal y pedir trabajar con tus superiores y compañeros para darle la vuelta a la situación.
- Solicitar ayuda profesional: Considera la posibilidad de buscar el apoyo de un profesional de la salud mental, como un psicólogo o incluso tu médico de cabecera, que pueda proporcionarte estrategias adaptadas para gestionar el estrés y el agotamiento.
- Para, respira y piensa en tu presente y tu futuro: Reflexiona sobre tus objetivos profesionales y personales. Es posible que necesites ajustar tus expectativas o cambiar de dirección para encontrar un camino más sostenible y satisfactorio.
- Implementa cambios en tu rutina: Introduce cambios saludables en tu rutina diaria que promuevan la recuperación, como mejorar tus hábitos de sueño, dedicar tiempo a actividades recreativas y reducir las horas de trabajo excesivas.
En conclusión
Hoy en «cosas que a mi nunca me van a pasar» tenemos uno de los males del siglo XXI. Identificarlo, aceptarlo y trabajar en soluciones es el único camino. La vida te va enseñando a base de palos, cuando eres joven te crees invencible, pero la vida no trata de no tropezarse, trata de levantarse una y mil veces y de aprender. Y no, no quiero decir la palabra de moda (resiliencia) porque la entiendo como un «te aguantas, lo asimilas y continuas», pero hay más salidas y, a veces, si algo te hace daño, una opción viable es dejarlo y a otra cosa.


