Cambio de rumbo

Llegó el momento, mi cabeza me pedía un cambio y me lo han servido en bandeja. Dejo estabilidad y control. Dejo mi zona de confort, pero me voy a otro proyecto donde voy a evolucionar a nivel profesional. Opino que los cambios siempre son buenos, y que las oportunidades hay que identificarlas y perseguirlas.

La decisión la tenía tomada desde hace tiempo, a la espera de la oportunidad, pero salir de la zona de confort cuando lo tienes todo, es complicado. Me voy porque soy inquieto, porque no me gusta estar mucho tiempo en un sitio, porque en la vida hay que evolucionar y mejorar. Detrás dejo algo muy bueno, y lo quiero dejar de la mejor forma posible, ¿Quién sabe cuando tendré que llamar a esa puerta?

Salgo a dar una vuelta

La vida da muchas vueltas y las vueltas dan mucha vida. Y yo salgo a dar una vuelta. La oportunidad que me ha llegado es por una de esas puertas que dejé entreabierta hace años, que en un momento dado, te llama.

Espero dar lo mejor de mi y evolucionar mejorando mis habilidades y competencias. Posiblemente vaya a ser más complicado que mi posición actual, pero ya no le tengo miedo a nada. Sé quien soy y qué puedo ofrecer.